lunes, 7 de octubre de 2013

Dioses

Angustia, me arrodillo ante tu poder omnipresente

Heme aquí, inclinado entre sollozos rumiantes
buscando en el follaje de mis tristezas.

Cómo puede el ser humando sentir tanto?
Frágiles cuerpos, montones de células...

Cómo ha de ser posible soportar este peso?
Melancolía y desamor... amargos sentimientos.

Veneno del alma mía...!

Mi cabeza duele de pensar en soluciones,
que mejoren esta estúpida agonía,

Dioses del averno y la puerta del Hades,
acaso no os he servido bien?

Siempre oscuro, siempre triste...
No he sido lo que esperabais?

Dioses, sombras del antiguo poder,
cuándo seré libre del yugo de vivir?

Abandono las sonrisas y abrazos pasajeros,
os regalo la calidez de mis recuerdos.

Dioses de la muerte y sueño eterno, venid!
Mirad! Las cadenas del recuerdo queman fuerte.

En plena noche, en silencio espectante,
vengan con susurros de calmada  paz.

Y os juro Dioses míos, ahora!
Que abriré mis brazos al sueño eterno

Abriré mis brazos anestesiados,
al encanto de su abrazo... a la muerte!

1 comentario:

  1. Es como un canto de agonía, aveces los mejores escritos provienen del dolor, en lo personal prefiero una alegría ajena a un buen escrito, spero que tu corazón pronto se llene de alegría :) un abrazo

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