Seis de Febrero de 2012

Y aquí estoy... hoy dejé la casa de mi amigo Erien; y Andrea me despidió en el terminal de Puerto Montt.
A eso de las 12:30 hrs. embarqué camino a Pucón, llegando cerca de las 19:00 hrs.
Entonces comencé por buscar la oficina de turismo, me costó encontrarla, aunque he estado aquí antes, la ciudad se me presentó como una desconocida. Recorrí las calles, preguntas aquí y allá, hasta que di con la anhelada dirección; algo cansado ya de mi enorme mochila.
Me dieron dos opciones de camping, y escogí la más cercana, "Camping La Posa", al llegar sólo quedaba un lugar; hermoso a primera vista, pero que dejaba mucho que desear a la razón citadina tan envuelta en tul y pulcritud.

Acomodé mis cosas armé mi iglú, y partí a lavar mi cuerpo desaseado. Mejoré en algo la pinta de trasnoche y partí a comer a la "picá" que amablemente me recomendó Andrea. Una hamburguesa casera con papas y bebida, una hamburguesa enorme que abarcaba el plato completo, y debo decir que, aunque sin haber almorzado, apenas pude con toda ella, deliciosa por lo demás.
Luego me dediqué a vagar apresurado, en busca del combustible de todo escritor cliché, alcohol etílico y cigarrillos.

Ahora escribo mis peripecias balbuceantes, algo cohibido aun por la sola presencia de mi mismo; lleno de la soledad de la que tantas veces he huido.

Durante el viaje, he descubierto que hay dos tipos de personas:
Están aquellos que comparten tu felicidad, te aprueban y reprochan con un abrazo cálido; esos que aportan con un gesto, sin esperar retribución, a que tu camino de vida sea más llevadero, mejor...
y están aquellos que nos son parte; esos que que por más que insistas a veces, no son más que un obstáculo embellecido; están esos que debieran salir de tu círculo.

He aprendido también que aunque uno no busque, encuentra. Que si mantienes los brazos abiertos, siempre encontrarás personas con quién poder compartir, una palabra, una reunión fugaz... sea en un bus, en la disco, o en el quincho de un camping que cierra a las 24hrs...

Mi camino de soledad... no... mi camino de auto descubrimiento comenzó este día.